¿Qué pasaría si el 9 de marzo el PSOE no obtuviera mayoría absoluta y tuviera que pactar con IU LV-CA y/o con Coalición Andalucista? ¿Sería posible que estos dos partidos pusieran como condición que Manuel Chaves se retirara y apoyaran a María del Mar Moreno como futura presidenta de la Junta?
¿Qué pasaría si el Partido Popular en el Parlamento Andaluz sustituyera a Antonio Sanz como portavoz por Carlos Rojas?
¿Qué pasaría si Izquierda Unida y Coalición Andalucista recuperasen a gente de valía y la volviesen a incorporar a la política activa?
Nota importante: estas propuestas no son un FIN en sí mismo, sino un MEDIO. Además, se refieren a un aspecto parcial y reducido del problema (el sistema político de democracia representativa). Conviene tener en cuenta que hay otros temas más urgentes: educación, sanidad, problema de la vivienda, especulación, atención a las tres provincias orientales (Jaén, Granada y Almería) en cuanto a infraestructuras de comunicación, potenciación de la investigación en buenas condiciones laborales, etc.
viernes, febrero 29, 2008
jueves, febrero 28, 2008
Otras voces en las elecciones del 9 de marzo
Independientemente de lo que nos quieran hacer creer ciertos medios de comunicación, que parecen que mentalizan a la ciudadanía de que sólo existen dos opciones posibles (contribuye también los debates a dos, aunque resulten interesantes), hay otras fuerzas políticas alternativas.
Izquierda Unida. Candidatos: Gaspar Llamazares, Joan Herrera (nº. 1 al Congreso por Barcelona), María Montserrat Muñoz (nº. 3 por Madrid) y Manuel Morales (nº. 1 por Granada).
Unión, Progreso y Democracia: Rosa Díez. No coincido del todo con ellos en su postura hacia los nacionalismos y otros aspectos, pero me parecen interesantes sus propuestas para reformar la ley electoral, acabar con la politización de la justicia y recuperar la idea de un Estado fuerte y con las autonomías en pie de igualdad en derechos y obligaciones.
Chunta Aragonesista: José Antonio Labordeta (nº. 2 de la lista al Congreso por Zaragoza).
Coalición Andalucista. Candidatos más destacados: Pilar González (nº. 1 al Congreso por Sevilla), Julián Álvarez (nº.1 al Parlamento Andaluz por Sevilla), Hilario Aranda (nº. 1 al Parlamento Andaluz por Granada).
Bloque Nacionalista Galego. Candidatos: Francisco Jorquera (nº. 1 al Congreso por A Coruña), Olaia Fernández Davila (nº. 1 por Pontevedra), Iago Tabarés (nº. 1 por Ourense) y Paz Abraira (nº. 1 por Lugo).
Izquierda Unida. Candidatos: Gaspar Llamazares, Joan Herrera (nº. 1 al Congreso por Barcelona), María Montserrat Muñoz (nº. 3 por Madrid) y Manuel Morales (nº. 1 por Granada).
Unión, Progreso y Democracia: Rosa Díez. No coincido del todo con ellos en su postura hacia los nacionalismos y otros aspectos, pero me parecen interesantes sus propuestas para reformar la ley electoral, acabar con la politización de la justicia y recuperar la idea de un Estado fuerte y con las autonomías en pie de igualdad en derechos y obligaciones.
Chunta Aragonesista: José Antonio Labordeta (nº. 2 de la lista al Congreso por Zaragoza).
Coalición Andalucista. Candidatos más destacados: Pilar González (nº. 1 al Congreso por Sevilla), Julián Álvarez (nº.1 al Parlamento Andaluz por Sevilla), Hilario Aranda (nº. 1 al Parlamento Andaluz por Granada).
Bloque Nacionalista Galego. Candidatos: Francisco Jorquera (nº. 1 al Congreso por A Coruña), Olaia Fernández Davila (nº. 1 por Pontevedra), Iago Tabarés (nº. 1 por Ourense) y Paz Abraira (nº. 1 por Lugo).
Dos manifestaciones para el 1 de marzo
El próximo sábado se celebrarán dos convocatorias. La primera, una manifestación en defensa de otro modelo de investigación y para protestar contra la precariedad de los jóvenes investigadores en España. La segunda, una sentada en varias ciudades a favor de una vivienda digna y contra la especulación.
Estos dos acontecimientos pueden hacernos reflexionar sobre el poder de la condición de ciudadano/a, sobre todo en estas fechas tan señaladas. Esta condición no se limita a votar cada cuatro años, sino también a dar ejemplo, predicar y poner en práctica una serie de valores cívicos (respeto, tolerancia, etc) y movilizarse por una causa justa. También, advertirle a los políticos que si dicen representar los intereses de la ciudadanía, deben cambiar ciertas actitudes y escuchar más.
Podéis encontrar más información en Asociación de Jóvenes Investigadores Precarios de Granada y V de Vivienda.
Por favor, difundid la información y, sobre todo, participad si podéis
miércoles, febrero 20, 2008
135 años del primer régimen republicano en España
El pasado 11 de febrero se cumplieron 135 años desde que las Cortes españolas proclamaron la Iª. República. El nuevo régimen nació con muchas dificultades (mayoría parlamentaria monárquica, ejército reacio a sus principios, conflictos internos, división del propio republicanismo) y el pronunciamiento de enero de 1874 acabó con él. Sin embargo, otra desgracia que sufrió es resultar casi eclipsado por el recuerdo de la 2ª. República (1931-1936), en el sentido que no ha trascendido tanto como esta última, por motivos evidentes.
A pesar de ello, es menester recordar y rememorar a todos aquellos hombres y mujeres, pioneros de la democracia en nuestro país. Que, bien a nivel nacional, bien a nivel local, contribuyeron a luchar por una idea de España (recuerdo que los republicanismos en el siglo XIX defendieron la construcción de una identidad nacional, a diferencia de ciertos sectores de la derecha como el carlismo). Que ocupando algunos una cierta posición social, no dudaron en perseguir unos ideales de justicia social y de hacer frente a los desafíos de su tiempo (quintas, consumos, etc). Vaya, pues, mi homenaje a Francisco Pi y Margall, Estanislao Figueras, Nicolás Salmerón, Emilio Castelar, Víctor Pruneda, José Calatayud, Melchor Almagro y tantos otros y otras.
¿Qué le pido a una universidad?
Hace cinco años y medio cogí hice las maletas para empezar la carrera de Historia fuera de mi tierra, en Granada. Esta experiencia, junto con la vida en el Colegio Mayor, me sirvió para crecer y, aunque pueda parecer contradictorio, apreciar más a Jaén, desde la distancia.
El caso es que desde hace bastante tiempo he encaminado mis proyectos de futuro hacia la docencia y la investigación en la Universidad. Soy consciente de las dificultades de esa salida profesional, pero me gusta por varias razones. He estado meditando sobre lo que le pediría a una universidad como centro de trabajo y sería lo siguiente:
1. Que los alumnos/as tuvieran motivación y vocación, en la medida de lo posible.
2. Que ofreciera medios para desempeñar esa doble responsabilidad (docencia e investigación).
3. Que no fuera reducto de "camarillas" o, en su defecto, evitar que las enemistades y rivalidades impidieran la proyección y despegue del departamento o facultad en cuestión.
4. Que sus profesores fueran receptivos, plantearan iniciativas e informasen a sus alumnos a la hora de organizar eventos culturales.
5. Que existiera una cierta rotación con otras universidades, de forma que pasaran continuamente profesores visitantes por sus aulas.
6. Que fomentara la inquietud por saber, el pensamiento crítico, el diálogo y la tolerancia. O, por lo menos, que transmitiese algo a los alumnos/as por medio del debate y la discusión.
El caso es que desde hace bastante tiempo he encaminado mis proyectos de futuro hacia la docencia y la investigación en la Universidad. Soy consciente de las dificultades de esa salida profesional, pero me gusta por varias razones. He estado meditando sobre lo que le pediría a una universidad como centro de trabajo y sería lo siguiente:
1. Que los alumnos/as tuvieran motivación y vocación, en la medida de lo posible.
2. Que ofreciera medios para desempeñar esa doble responsabilidad (docencia e investigación).
3. Que no fuera reducto de "camarillas" o, en su defecto, evitar que las enemistades y rivalidades impidieran la proyección y despegue del departamento o facultad en cuestión.
4. Que sus profesores fueran receptivos, plantearan iniciativas e informasen a sus alumnos a la hora de organizar eventos culturales.
5. Que existiera una cierta rotación con otras universidades, de forma que pasaran continuamente profesores visitantes por sus aulas.
6. Que fomentara la inquietud por saber, el pensamiento crítico, el diálogo y la tolerancia. O, por lo menos, que transmitiese algo a los alumnos/as por medio del debate y la discusión.
El tratamiento a Jaén
Puede parecer un poco "chovinista" y desfasado temporalmente hablar de la Nochevieja jiennense a estas alturas del año. ¿La razón? Quería retomar el blog con un post antiguo remodelado (ya lo publiqué en Cruce de caminos) y tener algún momento de sano ejercicio ciudadano del pataleo. Que propio, ¿no es así? Elegir fechas próximas a la campaña electoral para sacar estos temas. Acaso me voy dando cuenta de la importancia moral del voto (no es un cheque en blanco para los políticos) y que la ciudadanía debe movilizarse a favor de las causas que considera justas.
La pasada Nochevieja Canal Sur retransmitió las campanadas de fin de año desde la Catedral de Jaén. Y, en conciencia, debo protestar por la forma en que se hizo. Entiendo, como me advirtió un amigo mío, que el objetivo no era tanto promocionar la ciudad a través del evento como mantener la audiencia. Pero pienso que una cosa no estaba reñida con la otra.
Según cómo los viví, los hechos sucedieron así:
* 31 de diciembre de 2007, 23:48. El especial de Juan y medio hace una pausa para retransmitir las campanadas desde la Plaza de Santa María, en Jaén.
* 23:50 horas. Los presentadores del especial permanecen en una sala frente a la Catedral, pero sin salir al balcón o mostrar la plaza al fondo. Anuncian que van a hacer un simulacro, original eso sí (con cencerros), pero con poca antelación.
* Al mismo tiempo: En la Plaza se concentran numerosas personas. La iluminación normal de la Catedral se ha apagado y la están mostrando iluminada con focos de colores, sin que se pueda distinguir bien su monumentalidad.
* 0:00 horas. El reloj de la Catedral da los correspondientes tañidos.
* 0:01 horas. La Catedral sigue iluminada con focos de colores y se lanzan desde otro punto de la ciudad fuegos artificiales.
Posibles críticas:
* Cuando una ciudad sale en televisión para algo bueno, sobre todo una ciudad provinciana que debe promocionarse como Jaén, debería cuidarse la imagen que se da de ella (en este caso, de su Catedral, sobre todo si se quiere conseguir que sea declarada Patrimonio de la Humanidad).
* ¿No deberían de haber salido los presentadores al exterior y así ofrecer una visión diferente de la Plaza?
* ¿No podrían haber indicado alguno de ellos o desde los estudios de televisión el orden de las campanadas conforme se iban dando?
* ¿No podría haberse respetado la iluminación normal de la Catedral, apagándose un momento e iluminando su reloj con focos, para luego volver a encenderla tras las campanadas?
Claro que, si alguien lee esto, puede pensar tres cosas:
1. Soy el típico jaenero que critica todas las innovaciones en su ciudad, sean buenas o malas. De esos que decían que el castillo, estas Navidades, parecía un lupanar (por no decir una cosa peor), con la iluminación de colorines; y a los que Jesús Tíscar calificaba en un artículo en el Jaén como "tristes".
2. Que soy un jaenero tradicional cuya crítica esconde una intencionalidad política o un planteamiento sectario (si lo hace tal partido, está mal y pierden el tiempo tratando de convencerme de lo contrario).
3. Que no tengo en cuenta el enorme esfuerzo y trabajo de los profesionales de la televisión (periodistas, realizadores, etc).
Afortunadamente, en esta vida las cosas no son blancas o negras. Todos somos subjetivos y cada cual analiza la realidad en función de sus intereses, formación, ideología, etc. Por tanto:
1. Como ciudadano tengo derecho a criticar lo que creo que podría mejorarse, independientemente del color político del Ayuntamiento o del Gobierno autonómico.
2. Podría haberse hecho de otra manera, pues había medios para ello. No es una jornada cualquiera, son las campanadas de Nochevieja y van a tener una audiencia considerable. Se puede vender una buena imagen de un ciudad.
3. Importantes cargos de la Junta han sido elegidos por los jiennenses. Deberían reclamarle al ente público autonómico (Canal Sur) que se preocupe por promocionar la ciudad donde se retransmiten las campanadas
La pasada Nochevieja Canal Sur retransmitió las campanadas de fin de año desde la Catedral de Jaén. Y, en conciencia, debo protestar por la forma en que se hizo. Entiendo, como me advirtió un amigo mío, que el objetivo no era tanto promocionar la ciudad a través del evento como mantener la audiencia. Pero pienso que una cosa no estaba reñida con la otra.
Según cómo los viví, los hechos sucedieron así:
* 31 de diciembre de 2007, 23:48. El especial de Juan y medio hace una pausa para retransmitir las campanadas desde la Plaza de Santa María, en Jaén.
* 23:50 horas. Los presentadores del especial permanecen en una sala frente a la Catedral, pero sin salir al balcón o mostrar la plaza al fondo. Anuncian que van a hacer un simulacro, original eso sí (con cencerros), pero con poca antelación.
* Al mismo tiempo: En la Plaza se concentran numerosas personas. La iluminación normal de la Catedral se ha apagado y la están mostrando iluminada con focos de colores, sin que se pueda distinguir bien su monumentalidad.
* 0:00 horas. El reloj de la Catedral da los correspondientes tañidos.
* 0:01 horas. La Catedral sigue iluminada con focos de colores y se lanzan desde otro punto de la ciudad fuegos artificiales.
Posibles críticas:
* Cuando una ciudad sale en televisión para algo bueno, sobre todo una ciudad provinciana que debe promocionarse como Jaén, debería cuidarse la imagen que se da de ella (en este caso, de su Catedral, sobre todo si se quiere conseguir que sea declarada Patrimonio de la Humanidad).
* ¿No deberían de haber salido los presentadores al exterior y así ofrecer una visión diferente de la Plaza?
* ¿No podrían haber indicado alguno de ellos o desde los estudios de televisión el orden de las campanadas conforme se iban dando?
* ¿No podría haberse respetado la iluminación normal de la Catedral, apagándose un momento e iluminando su reloj con focos, para luego volver a encenderla tras las campanadas?
Claro que, si alguien lee esto, puede pensar tres cosas:
1. Soy el típico jaenero que critica todas las innovaciones en su ciudad, sean buenas o malas. De esos que decían que el castillo, estas Navidades, parecía un lupanar (por no decir una cosa peor), con la iluminación de colorines; y a los que Jesús Tíscar calificaba en un artículo en el Jaén como "tristes".
2. Que soy un jaenero tradicional cuya crítica esconde una intencionalidad política o un planteamiento sectario (si lo hace tal partido, está mal y pierden el tiempo tratando de convencerme de lo contrario).
3. Que no tengo en cuenta el enorme esfuerzo y trabajo de los profesionales de la televisión (periodistas, realizadores, etc).
Afortunadamente, en esta vida las cosas no son blancas o negras. Todos somos subjetivos y cada cual analiza la realidad en función de sus intereses, formación, ideología, etc. Por tanto:
1. Como ciudadano tengo derecho a criticar lo que creo que podría mejorarse, independientemente del color político del Ayuntamiento o del Gobierno autonómico.
2. Podría haberse hecho de otra manera, pues había medios para ello. No es una jornada cualquiera, son las campanadas de Nochevieja y van a tener una audiencia considerable. Se puede vender una buena imagen de un ciudad.
3. Importantes cargos de la Junta han sido elegidos por los jiennenses. Deberían reclamarle al ente público autonómico (Canal Sur) que se preocupe por promocionar la ciudad donde se retransmiten las campanadas
Suscribirse a:
Entradas (Atom)