Hace ya más de tres semanas que hemos empezado el nuevo año (por cierto, espero que todos y todas hayáis empezado éste con buen pie). Si hay algo en lo que le he sacado partido a las vacaciones de Navidad ha sido la posibilidad de reflexionar sobre mi vida, mi entorno, mis relaciones, mi credo político y religioso, mis ilusiones, mis proyectos, ... (gracias, Yanfer, por los posts que pusiste en su día, pues te he vuelto a leer con otra perspectiva).
Este año 2007 me he prometido a mí mismo que tiene que ser el año del compromiso, en el mejor de los sentidos. Ser coherente en la medida de mis posibilidades con mis ideas y mi conciencia, poner mi granito de arena en la buena marcha de las actividades del Colegio, atender a la realidad que me rodea, superar parte de mis miedos, etc. Claro, que una cosa son mis pretensiones a 23 de enero y otra muy diferente el balance que presumiblemente haré a 31 de diciembre. Espero que buena parte de esas expectativas se vean cubiertas.
Este año 2007 me he prometido a mí mismo que tiene que ser el año del compromiso, en el mejor de los sentidos. Ser coherente en la medida de mis posibilidades con mis ideas y mi conciencia, poner mi granito de arena en la buena marcha de las actividades del Colegio, atender a la realidad que me rodea, superar parte de mis miedos, etc. Claro, que una cosa son mis pretensiones a 23 de enero y otra muy diferente el balance que presumiblemente haré a 31 de diciembre. Espero que buena parte de esas expectativas se vean cubiertas.
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